lunes, 22 de julio de 2013

Conclusiones del juicio de Bretón

Iba a escribir esto la semana pasada, pero no encontré tiempo.

Tenemos, efectivamente, graves indicios de la culpabilidad del sujeto. Su actitud es escalofriante, se muestra impasible, con una pachorra insólita (tampoco veo, que conste, muy normal como ha actuado la madre). Además, primero dice que perdió a los niños y luego que "están bien". ¿Y cómo lo sabe?. Sus compras de gasóleo días antes de la desparición tampoco fueron muy normales. El jurado popular, instrumento totalmente inadecuado en casos como éste, en que los medios nos han bombardeado constantemente dictando sentencia de antemano, comisarios de policía incluidos (como para no acordarse del caso Wanninkof y de Dolores Vázquez), ha dictaminado por unanimidad que Jose Bretón es culpable. Alguien debería modificar la Ley de Enjuiciamiento Criminal para éstos casos.

 Ahora bien, desde el punto de vista del derecho procesal, ¿realmente es suficiente para dictar sentencia condenatoria?

Y digo esto, porque se han dado por supuesto cosas que no eran. Se ha afirmado que las cámaras de Córdoba reflejaron, sin ninguna duda, que cuando entro con el coche iba sólo, sin los niños. ¿Qué hemos visto en el juicio? que la calidad de imagen es tan deficiente, que en realidad es prácticamente imposible apreciar ese detalle. Además, y esto es totalmente inaudito, lo sucedido con los análisis de los huesos hallados en la finca de las Quemadillas no tiene ningún sentido. El informe de la policía científica de octubre de 2.011 determinó que, sin duda alguna, pertenecían a algún roedor, quién sabe si a un tejón o a una rata enorme. En agosto de 2.012, de pronto, sucesivos análisis empiezan a salir con que de eso nada, que eran niños humanos. Joder, después de diez meses nos enteramos. Según dijo el fiscal, aunque no se haya hecho una vigilancia permanente de la cadena de custodia, los huesos sin duda son los mismos... vuelvo a preguntar, ¿cómo lo sabe?.

Sin duda, me cuesta creer que alguien pusiera allí los huesos de unos niños para resolver el caso. Conste que no pienso que la madre pueda hacer eso. Sabemos, eso si, que muchos familiares de los niños, tanto por vía materna como paterna, han sido absurdamente agresivos contra la otra parte de la familia, así en general, con continuos episodios de insultos y flagantes amenazas. Por otra parte, entre los funcionarios policiales de éste país siempre ha habido ovejas negras. Aunque suene descabellado, y no deje de ser una posibilidad remota, ¿y si alguna de esas ovejas tuviese interés en ocultar un secuestro? resulta poco probable, pero vistas las anomalías, tal vez no debió descartarse esa línea de investigación. Manteniendo, eso sí, al acusado en prisión preventiva; pues dado el cálculo de probabilidades (navaja de Occam y tal) una hipótesis aternativa tendria que ser demostrada.

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